Tres años de Bogotá39 (XV). Daniel Saldaña París

Con el objetivo de seguir celebrando la buena literatura, resaltando el talento y la diversidad de de producción literaria en Latinoamérica, hablamos con los integrantes de la lista Bogotá39-2017, tres años después de haber sido seleccionados. Hoy con nosotros el escritor, editor y traductor Daniel Saldaña París (México), autor de obras como El nervio principal En medio de extrañas víctimas .

Han pasado tres años desde que se publicase la lista Bogotá39-2017 y fuiste seleccionado. ¿Nos puedes contar cómo ha continuado tu trabajo como escritor desde entonces?

Mi trabajo ha continuado con la lentitud habitual: publiqué una novela en 2018 y ahora estoy terminando un libro de ensayos personales. Mientras tanto, he seguido publicando en revistas y otros medios, haciendo traducción y edición y dando talleres.

¿Podrías compartir con nosotros los nombres de tus autores/as favoritos de cuento y novela?  

No tengo autores favoritos porque es una lista en constante mutación. Disfruto mucho los cuentos de Kafka y de Alice Munro, por ejemplo; y las novelas de Coetzee.

¿En qué proyecto/s estás involucrado en estos momentos?

Estoy dándole una última corregida (espero) a un libro de ensayos o crónicas personales; es un libro muy narrativo y autobiográfico. También estoy trabajando en una novela de la que espero tener un primer borrador antes de que termine el año.

¿A qué paisano/a tuyo recomendarías para una hipotética Bogotá39-2027?

A Aniela Rodríguez, Jorge Comensal y Jazmina Barrera.

¿Cuál deber ser el papel de la cultura en el mundo post-cuarentena? ¿Crees que cambie mucho en relación al contexto previo?

El papel de la cultura es preguntarse siempre cuál es el papel de la cultura y asumir que todas las respuestas son provisionales y parciales: lo demás es pontificado de columnistas.

Borges se imaginó el paraíso como una gran biblioteca, Kafka se imaginaba viviendo en un sótano donde pudiese leer, y Woolf recalcó la importancia de una habitación propia para escribir poesía y ficción. En tiempos de confinamiento y con los nuevos formatos de lectura digital, tal vez ellos hubieran cumplido sus fantasías. Para una escritora, ¿es la cuarentena un paraíso o una pesadilla?

Es una pesadilla cualquier situación en la que mueren miles de personas que podrían salvarse si hubiera un sistema eficaz de salud pública y las medidas necesarias para que todos afronten la crisis en igualdad de condiciones. Respecto a mi ejercicio de escritura: prefiero poder salir a caminar a veces y dar largos paseos para aclarar mis ideas. El encierro no me resulta tan benéfico.

¿Durante el confinamiento estás siendo más escritor o lector?

Tengo mis rachas. Pasé un par de semanas escribiendo bastante, luego un par de semanas leyendo diarios personales sin descanso. Ahora sólo puedo ver series y quejarme.

¿Cuál es el libro inevitable durante el confinamiento?

En mi caso, regreso siempre a la poesía. Al principio de la cuarentena compré por internet la poesía reunida de Olvido García Valdés; eso me ha mantenido a flote.