“Soy una persona más simple de mente de lo que se cree”

Las tres voces que componen Los testamentos fueron la primera preocupación de Peter Florence –el director fundador del Hay Festival– quien moderó la charla con Margaret Atwood. El libro recoge las narraciones testimoniales de tres mujeres que viven en esta Norteamérica alterna 16 años después de los hechos narrados en El cuento de la criada, y ofrecen perspectivas vivenciales drásticamente disímiles. La discusión se detuvo en la tía Lydia, un personaje temerario en El cuento de la criada que tiene una inesperada versión de los hechos en Los testamentos. “Siempre es interesante voltear una historia. Las cosas se ven bastante diferentes cuando eres el lobo”.

Los testamentos, más que una secuela, es una exploración más profunda en el universo distópico de Gilead. 35 años después de la publicación de la escalofriante novela que se hizo una exitosa serie de televisión, el terreno quedó arado para recibir esta segunda entrega: El cuento de la criada se nutrió de muchas ideas de la segunda ola del feminismo de los años 70. Pero después de eventos coyunturales en Estados Unidos como la caída de las Torres Gemelas, la crisis financiera de 2008, “el mundo tuvo un pequeño respiro con Obama… y luego sabemos qué siguió”, dijo Margaret Atwood. Con el actual panorama global, el aterrador escenario de El cuento de la criada ya no se percibe como “algo que se puede evitar, sino algo que potencialmente puede suceder”.

Peter Florence ahondó en el papel de América Latina en la confección de ambos libros. Con su experiencia con instituciones como Amnistía Internacional o PEN en los años 70 y 80, Atwood tuvo una mirada atenta a los regímenes dictatoriales en la región, especialmente en Argentina. Florence también quiso saber si con la compleja y original propuesta de la trama de Los testamentos, Margaret se considera subversiva. “Soy una persona mucho más simple de mente de lo que crees que soy, Peter”. El Auditorio Getsemaní del Centro de Convenciones rió por enésima vez con esta simple narradora que lleva 50 años cautivando lectores de todo el mundo.